Tips para Cuidar tu Lavanda en Maceta

¡Hola, Plant Mate!

Te apuesto a que la lavanda es uno de tus aromas preferidos, y no me sorprendería porque no lo sería.

Con sus flores de color púrpura y un olor único, la lavanda es una excelente compañera para darle un toque especial a tu espacio. Pero ojo, como todas las plantas, la lavanda tiene sus cuidados especiales.

Aquí te dejamos una mini guía para que sepas más sobre la lavanda, y en especial, cómo cuidarla bien.

La lavanda es originaria de la región mediterránea y es de la familia de las Lamiaceae.

Un fun fact es que la lavanda ha estado por todos lados, desde la cocina hasta en la medicina antigua. Las personas la han usado desde siempre para baños aromáticos, para curar quemaduras y problemas en la piel o simplemente para preparar unos drinks por la noche.

Después de darte esta introducción a esta increíble planta, aquí va los cuidados de la lavanda en maceta.

Consejos para cuidar para tu lavanda en maceta

Selecciona la lavanda perfecta

Existen alrededor de 30 a 40 especies de este tipo de planta, por lo que antes de adquirirla, es importante elegir la lavanda correcta.

La lavanda más usada para la jardinería y el cultivo en maceta es la lavanda inglesa (lavandula angustifolia), debido a su tamaño manejable. Plant mate, por favor, no vayas a elegir una planta que tenga signos de enfermedad, como hojas marchitas o decoloradas. Elige una planta saludable.


Entre más luz mejor

Su happy place es un lugar con mucha luz. La lavanda requiere de abundante luz solar para florecer, idealmente de 6 a 8 horas de luz directa al día. Si quieres tener tu lavanda en maceta dentro de tu casa, no te preocupes, solo asegúrate de colocar la maceta cerca de una ventana que reciba luz solar directa.


El riego

La lavanda prefiere un suelo ligeramente seco; la puedes regar solamente cuando la capa superior del suelo esté seca al tacto.

Durante los meses más cálidos, la debes regar normalmente una vez a la semana, mientras que en invierno el riego debe reducirse. Si la riegas en exceso puedes perjudicarla, entonces es mejor escuchar y ver lo que tu planta te va pidiendo.


Elección de la maceta

Esta planta prefiere un drenaje rápido, por lo que es súper importante elegir una maceta con agujeros de drenaje para evitar el exceso de humedad.

También asegúrate de que la maceta sea lo suficientemente grande para acomodar el crecimiento de la planta, con un poco de espacio extra para el desarrollo de las raíces. 


Sustrato ideal

El sustrato ideal para la lavanda en maceta debe drenar bien y debe ser una mezcla de tierra con perlita o arena gruesa; esto ayuda a mejorar el drenaje. Evita las mezclas de suelo que retienen demasiada agua. A la lavanda no le gustan los suelos demasiado fértiles o pesados.


Fertilización

La lavanda es bastante sencilla en cuanto a fertilización, realmente no necesita mucho, especialmente si ya la plantaste en buen suelo lleno de nutrientes.

Si te animas a fertilizar, te recomiendo que uses un fertilizante de liberación lenta que sea equilibrado, justo cuando arranque la temporada de crecimiento. Pero no te vayas a pasar con el fertilizante, porque si no, vas a terminar con un montón de hojas y pocas flores, y además, podría afectar ese aroma tan increíble que tiene la lavanda.


Poda

En cuanto a la poda, hacerlo con regularidad es clave para que tu lavanda se vea como quieres y para animarla a que saque flores nuevas. Lo ideal es darle una poda suavecita después de que florezca para incentivar que crezca más, pero ten cuidado de no podar demasiado duro ni cortar la madera más vieja, porque si lo haces, es posible que no vuelva a crecer bien desde ahí.

 

lavanda en maceta


Tips extras para el cuidado de tu lavanda

Si donde vives se pone bastante frío en invierno, hay que cuidar especialmente tu lavanda en maceta.
Lo mejor es que la metas dentro de casa, cerca de una ventana donde le dé el sol. Durante esos meses fríos, baja la frecuencia con la que la riegas, pero asegúrate de que todavía reciba suficiente luz para que se mantenga feliz y sana hasta que vuelva la primavera.
A la lavanda le va súper bien la grava o piedra pómez en lugar del mulch orgánico. Esto es porque esos materiales ayudan a que le llegue más luz, mantienen la tierra calentita y se aseguran de que el drenaje esté a punto, aparte de que evitan las malas hierbas.

Fun facts:

  • En la aromaterapia, el aceite esencial de lavanda es un pilar. Las personas lo aman por su capacidad para aliviar el estrés, mejorar el sueño y combatir la ansiedad. 
  • Estudios recientes dicen que la lavanda puede tener efectos neuroprotectores y ser beneficiosa en el tratamiento de condiciones como la depresión y la fatiga.
  • La lavanda le ha dado un giro a la gastronomía, añadiendo un toque floral a platos y bebidas. Desde helados hasta drinks.
  • En el ámbito de la conservación, la lavanda desempeña un papel muy importante en la biodiversidad, atrayendo polinizadores como abejas y mariposas a su néctar.
  • La lavanda actúa como un repelente natural contra mosquitos, polillas y otros insectos, gracias a su alto contenido de linalool, un alcohol terpénico que muchos insectos encuentran desagradable.

La lavanda no es solo una planta con un olor increíble y flores bonitas; es toda una estrella en el mundo de las plantas, capaz de llevar tu jardín o tu casa a otro nivel.

Desde sus raíces mediterráneas hasta su papel en la aromaterapia y la cocina, esta planta ha demostrado ser sorprendentemente versátil y beneficiosa. No solo nos ayuda a relajarnos y dormir mejor, sino que también puede tener efectos positivos en nuestra salud mental, algo súper importante en estos tiempos.

Así que, si buscas darle un toque especial a tu hogar, mejorar tu salud o simplemente disfrutar de su increíble aroma, la lavanda debería ser tu planta go-to.

Con estos consejos, espero que te animes a hacerle un hueco a la lavanda en tu vida. ¡Vale totalmente la pena!


Plant some love!

The Rootmate Team